Las chapas del Gimnasio Deportivo estaban muy deterioradas. Algo había que hacer. Entre la disyuntiva de repararlas, que eran muchas, y modificar el techado, se optó por esto último. Y se están esperando presupuestos para el techado nuevo. Y ya que lo hacemos, más alto. Esto para que no ocurra lo que hasta ahora con la humedad. También más ventanales para la oxigenación, levantar el piso por el desagüe y porque no también darle más capacidad. Miguel Muglia piensa llevar la idea a la Asamblea General Ordinaria. Le comento que de acuerdo a los nuevos Estatutos Sociales no hace falta. Me responde que lo hizo porque mucha gente trabajó en el anterior techado y que por respeto debe hacerlo. Es cierto. Recuerdo a Pardo Mastromónaco, Francisco Gentile y Juan Carlos Aurignac y otros que no recuerdo que pidieron sus vacaciones donde trabajaban para hacer de peones de albañiles en esa construcción. Y algunos que “no hacían” horas extras para venir a ayudar.
Y como los gastos de los deportes son muchos, las dos sub-comisiones deportivas organizaron campeonatos de truco, excursiones de pesca y bingos.
domingo, 19 de julio de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario